Europa exige accesibilidad total en libros electrónicos y lectura para todas las personas, sin importar sus capacidades físicas o sensoriales, desde el mes de junio.
La nueva normativa responde a un compromiso con la inclusión y la igualdad de oportunidades, obligando tanto a editoriales como a plataformas digitales a ofrecer productos y servicios accesibles.
La legislación exige que los eBooks sean accesibles desde su diseño. Es decir, no basta con adaptar contenidos existentes, sino que los nuevos títulos deberán cumplir con ciertas condiciones técnicas que aseguren una lectura comprensible y flexible.



